Materiales para la Liberación # Manuel de auto-defensa civil. Grupo 17 de Marzo
Grupo 17 de Marzo. Sociedad de juristas para la defensa de los derechos humanos indivudiales y colectivos.
Presentamos a los compañeros del Grupo 17
de Marzo, una sociedad de jurístas para la defensa de los derechos
humanos indivudiales y colectivos. Estos compañeros han estado luchando
por la causa de los derechos humanos en toda Andalucía y defendiendo
diferentes causas dentro de los movimientos sociales en Andalucìa tales
como la defensa jurídica de las manifestaciones contra la Cumbre Europea
de 2007, apoyo jurídico al Centro Social Okupado y Autogestionado Casas
Viejas, poyo legal contra las “Ordenanzas Cívicas”, así como otras
numerosas asistencias jurídicas para la defensa de los derechos humanos.
Les presentamos así mismo su Manual para la auto-defensa civil, un manual que nos ayuda a estar protegidos ante los abusos políticales y de las fuerzas del régimen.
El 17 de Marzo se constituyó en Sevilla
un grupo de juristas dispuestos a luchar por los derechos humanos. Nos
consideramos un movimiento social de resistencia. Con vocación de
denuncia y de acción jurídica directa, nuestro objetivo es utilizar el
Derecho como arma de transformación social e instrumento de rebeldía.
Defendemos la socialización del Derecho, como arma de transformación
social e instrumento de rebeldía. Defendemos la socialización del
Derecho, para que llegue el momento de los derechos de los débiles y los
derechos colectivos.
Somos un grupo de juristas andaluces
organizados como movimiento social de transformación. Nos organizamos
como una red de personas dispuestas a luchar a través del derecho y a
apoyar las luchas sociales de todos los colectivos de resistencia.
En esta época de globalización
neoliberal, los movimientos sociales necesitan utilizar todas las
herramientas a su alcance para luchar contra un sistema en el que no
creemos, que sólo fomenta la desigualdad, el militarismo, el
empobrecimiento de los recursos naturales, la explotación de los países
del sur. El nuevo siglo ha extendido la conciencia de que, junto a otros
medios de lucha, también se puede combatir el sistema con sus propias
armas (la publicidad, Internet, o el Derecho) reutilizándolas ccomo
instrumentos de resistencia y revuelta.
Es cierto que con demasiada frecuencia
el Derecho sirve tan sólo para amparar los intereses de unas pocas
personas, a costa del bien colectivo y a través de la opresión, el
menosprecio e incluso la humillación de los más débiles. A diario se
dictan leyes que dan cobertura a las grandes corporaciones; las grandes
empresas obtienen facilidades en el despido y beneficios fiscales,
reciben terrenos recalificados, pagan menos impuestos, no se las
inspecciona, las normas de respeto al medio ambiente o de seguridad en
el trabajo no rigen para ellas. La ley se hace al dictado de los que
mueven el entramado de la economía y la política y no se aplica igual
para todos.
Las leyes no tienen piedad, son duras
cuando se aplican a los/as trabajadores/as, a quienes disienten, a los
excluidos. En cambio, frente a los ricos/as, a los políticos del
sistema, a los poderosos, la ley es toda suavidad, interpretación,
moderación. El derecho no falla cuando se trata de desahuciar a los
inquilinos/as, de multar a quienes protestan, de expulsar a los
migrantes que desobedecen el sistema de fronteras, o de encarcelar a
quien vive en situaciones de exclusión social, y sin embargo, resulta
absolutamente ineficaz para asegurar el derecho a la vivienda, para
combatir la precariedad laboral, evitar el terrorismo ecológico y
financiero de las grandes multinacionales o frenar la especulación.
Por si fuera poco, en los últimos
años, justo cuando parecía que empezábamos a alcanzar un grado razonable
de consenso social en torno a un mínimo de derechos civiles, estamos
sufriendo un brutal retroceso también en ese terreno. La llamada lucha
contra el terrorismo está sirviendo de excusa para socavar libertades,
criminalizar colectivos disidentes con el sistema y negar derechos
sobre grupos concretos, como los inmigrantes ?sin papeles?, a los que
se les niega la libre circulación y otros derechos como la
manifestación, huelga o asociación, además de abrir la puerta a la
invasión de la intimidad, a las detenciones arbitrarias y sin juicio? un
panorama, en definitiva, que nos devuelve al período anterior a la
Revolución Francesa.
Por todo esto hemos constituido una
sociedad de juristas. Se trata de un colectivo abierto, plural y
combativo formado por personas con formación jurídica y voluntad de
compromiso social. Nacemos con vocación de denuncia y de acción jurídica
directa. Seremos especialmente vigilantes del respeto a los derechos
humanos y colectivos por parte de los poderes públicos; creemos en la
libertad plena de los pueblos y las personas para decidir su futuro en
igualdad de condiciones con los demás.
Nuestro objetivo es utilizar el
Derecho como arma de transformación social e instrumento de rebeldía y
resistencia, teniendo presente las limitaciones que padecen los
Ordenamientos Jurídicos. Queremos poner el Derecho en manos de las
personas y los pueblos oprimidos y luchar juntos contra un sistema
ventajista, injusto y dominador.
Tenemos vocación de resistencia frente
a los abusos de los aparatos represores del Estado y para ello estamos
dispuestos a utilizar todos los recursos que nos ofrece el sistema para
exigir el respeto de los derechos, reclamar el castigo de los abusos,
perseguir la impunidad.
Defendemos la socialización del
Derecho. Las leyes deben dejar de ser monopolio de los abogados, jueces y
fiscales; en su lugar, creemos en la autodefensa, en la difusión del
uso alternativo del Derecho, en la formación jurídica de los oprimidos
para combatir en igualdad de armas frente a quienes los oprimen.
Hay que utilizar sus propias armas
contra ellos, reinventar un Derecho de la resistencia frente al Derecho
de la opresión. El Derecho tiene que dejar de ser el Derecho de los
ricos. Es el momento ya de los derechos humanos. El momento de los
derechos de los débiles y los derechos colectivos.
Manual para la auto-defensa civil
Este manual de Autodefensa Civil es una
guía práctica para resolver dudas y conocer problemas legales a las que
nos podemos enfrentar los activistas sociales. Un librito que recoge
situaciones y contextos que se pueden dar en las prácticas de lucha y
resistencia. La intención es que conozcamos los procedimientos y las
posibilidades de salir de momentos de aprieto real cuando se activa toda
la represión del estado democrático.
Os dejamos con el manual, que es de fácil
lectura y que os podrá dar toda la información jurídica sobre vuestros
derechos civiles para vuestra auto-defensa en el contexto de las luchas
sociales contra el régimen. Es importante la formacion de los nuestros
en todo este tema no solo para la auto-protección sino también y lo que
es muy importante para poder formar y proteger a los compañeros en
situaciones de riesgo en el seno de nuestras luchas.
Descargar Manual de auto-defensa civil
¡CONTRA LA REPRESIÓN SINDICAL, SOCIAL, Y POLÍTICA DE LOS NUESTROS!
¡POR LOS DERECHOS Y LAS LIBERTADES CIVILES!
¡SI NOS TOCAN A UNO NOS TOCAN A TODOS, DEFIENDE A LOS TUYOS, PROTEGE A TU GENTE!
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