El lento despegue de la coalición en su principal feudo en Bizkaia
El PNV incide en la "pasiva gestión" de Bildu en Busturialdea y Lea Artibai
imanol fradua - Domingo, 18 de Septiembre de 2011 - Actualizado a las 05:57h
gernika-lumo. Se hicieron con 35 consistorios de Bizkaia en mayo, pero Bildu reúne su mayor fuerza en dos comarcas. Busturialdea y Lea Artibai son su feudo, con doce municipios regidos bajo la unión de la izquierda abertzale con EA, pero significativo resultó que Ondarroa, Lekeitio, Gernika, Markina y Bermeo fueran a parar a sus manos. A poco de alcanzar los cien días al timón de los gobiernos municipales, y motivados por diversas circunstancias, el despegue de la coalición hacia la política de la gestión, hacia la resolución de los problemas más cercanos de la ciudadanía, está siendo más lento del esperado. Es más, voces autorizadas del PNV sentencian que "Bildu aún no ha sido capaz de encontrar la pista de aterrizaje".
"El comienzo de un nuevo tiempo político". Así glosaron varios alcaldes la llegada de Bildu al poder en la constitución de los ayuntamientos en junio. Se abría un nuevo periodo con una gestión más abierta a la participación, al debate, a la transparencia y a la cercanía. Era su carta de presentación. Ya están los representantes de la coalición en sus despachos, pero ese nuevo tiempo "está tardando demasiado en ser implantado", inciden desde el PNV de Busturialdea, donde los jeltzales gobiernan en más consistorios, pero es Bildu quien lo hace en las dos cabeceras, Bermeo y Gernika-Lumo, dirigidos por EA, aunque con la izquierda abertzale en una vigilante segunda fila. Por el contrario, es esta última formación la que copa las listas en Ondarroa y Lekeitio, mientras en Markina fue Aralar la llave para alcanzar el bastón de mando.
Con el parón veraniego en la actividad municipal, la celebración de las fiestas y lastradas las administraciones por la precaria situación económica, Bildu mostró cuales iban a ser sus líneas maestras en los programas electorales pueblo a pueblo. Pero todavía no han comenzado a dar los pasos necesarios que dejen entrever cómo implantarán sus planes estratégicos, ya que en algunos casos han pasado los primeros tres meses analizando la situación heredada. Afanados en efectuar un diagnóstico de la situación de Bermeo, la alcaldesa Idurre Bideguren adelanta que "hemos realizado una fotografía de la situación para poder definir qué medidas tomaremos". Trabajan en la planificación del próximo año, pero alertan de que "hemos encontrado un serio desequilibrio económico", cuyos efectos aclararán en octubre a la ciudadanía.
Pero llama la atención que transcurridos tres meses desde que Bildu se hiciera con los gobiernos locales en Lea Artibai, la actividad de las comisiones haya sido tan baja. Y mientras ha habido temas de rápida resolución sobre la mesa, la respuesta ha sido que el asunto debe ser tratado en comisión, "diluyendo la responsabilidad que las autoridades municipales deben tener", inciden desde la oposición en la zona. "Su única hoja de ruta es lo que dicen las comisiones, cuando nuestra localidad lo que necesita son planes para su desarrollo", indican desde el PNV de Markina, la formación que más votos cosechó en las municipales. Los jeltzales lekeitiarras aducen que "Bildu muestra una dejadez absoluta en la gestión, y, lo que es peor, no vemos planificación a futuro". Además, "han pasado el verano enfrascados en temas que sobrepasan el ámbito municipal, que es la política más cercana", relatan. En Busturialdea, la oposición denuncia "no haber recibido información de un partido que se autoproclama tan transparente". La apuesta por la participación ciudadana tampoco se ha traducido en hechos. "Todos debemos aprender cómo implantarla y estamos en el camino", asevera la alcaldesa de Bermeo.
liberados Otro de los temas que mayor fricción han generado han sido los sueldos de los responsables municipales. En algunos casos Bildu ha reducido esas partidas, pero el número de liberados ha ascendido. Este ha sido el caso de Bermeo, Gernika-Lumo y Lekeitio, donde la oposición ha denunciado esos "repartos de puestos" entre EA e izquierda abertzale. Además, estas primeras semanas han estado sazonadas con las disputas abiertas por la formación de las entidades a nivel supramunicipal. Aunque, con importantes proyectos abiertos, en Busturialdea la coalición deberá unificar antes sus encontradas posturas en planes como el desarrollo del polígono industrial de Muxika o el modelo a implantar en el consorcio de aguas comarcal, dos aspectos cruciales que les separan.
Sea por el empuje de la oposición o por otras circunstancias, la actividad municipal se está viendo incrementada durante estos últimos días. La llegada del nuevo curso parece haber acelerado el ritmo en la actividad municipal de los consistorios. Pero la oposición espera que Bildu "aterrice" por fin.
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